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El castillo Książ, su fantasma y un tren con oro

  


  El tercer castillo más grande de Polonia. Está situado en una colina y en sus alrededores cuenta con paisajes verdes llenos de colores, dependiendo de la estación del año, que nos trasladará a otra época. Su historia es muy larga y tiene muchos misterios. 

Te invito a conocer uno de los muchos tesoros de mi querida Polonia, aún tan poco conocida entre los hispanohablantes. Y espero que un día visites este pueblo tan sorprendente y maravilloso.


¿Cómo llegar al castillo?


  Si tu idea es viajar a Polonia por tu cuenta, la opción más cómoda para llegar al Castillo Książ, es sin duda ir en coche.
La otra opción es coger el tren PKP a Wałbrzych, es menos cómoda porque dependes de un horario fijo, pero también es muy recomendable. En mi opinión coger un tren en Polonia es bastante fácil desde muchas ciudades, ya que sale más económico. La ciudad más adecuada para hacer esta excursión es Breslavia (Wrocław), dado que es la capital de la Baja Silesia. Desde allí será un poquito más de una hora en tren.
Una vez que lleguemos a Wałbrzych tendremos que salir de la estación y coger un autobús, concretamente el número 8 (horario), que nos dejará justamente en la puerta del complejo del Castillo Książ. 




Un poquito de historia


  No se sabe exacto cuándo y quién construyó la fortaleza en Książ. La primera mención sobre ella es del siglo XIII. En este periodo la tierra pertenecia al Duque Bolko I, quien construyó la fortaleza para defender sus propiedades de sus enemigos.
Luego esta fortaleza quedó en manos checas, y después húngaras. El dueño húngaro convirtió la fortaleza en su castillo y residencia.

Más tarde el castillo fue adquirido por la familia aristócratica von Hochberg y fue continuamente ampliado y remodelado hasta bien entrado el siglo XX, conforma una gran variedad de estilos: desde el románico al barroco, pasando por el neo-renacentista.



La más famosa y última propietaria, fue Mary Theresa Olivia Cornwallis-West, primera esposa del Príncipe Hans Heinrich XV. Tenía el título de Princesa de Pless, pero era  popularmente conocida como Daisy

Hay una leyenda que cuenta que el espíritu de la dama visita el castillo y el jardín botánico todas las noches, debido a que aún no se sabe donde está enterrado su cuerpo.

"Las perlas malditas de la Princesa Daisy de Pless"

Cuentan que el marido de la princesa le prometió un largo collar de perlas. Después de casarse se fueron a un viaje exótico, que duró varios meses. La ruta de este viaje les llevó a través de la costa de África. En el Golfo de Adén, tuvo lugar una historia que podría recordarse a la princesa después de unos años en los momentos trágicos de su vida. Dicen que Daisy miraba desde su yate a un grupo de indígenas y veía como desaparecian en el mar en busca de las perlas, y uno de ellos murió a la vista de la princesa, debido a un esfuerzo excesivo. En sus últimos minutos maldijo el collar y la persona a la cuál tenían que adornar estas perlas.

Hoy en día no se sabe el lugar donde se encuentran las perlas y el cuerpo de la princesa Daisy, ya que los sirvientes sacaron el cuerpo del mausoleo a otro lugar, antes de que el ejército rojo invadiera la zona.

Este castillo es también conocido por haber sido durante la Segunda Guerra Mundial, el cuartel general de Hitler. Los nazis expulsaron a los dueños del castillo y excavaron numerosos túneles y complejos subterráneos. 

La leyenda de¨El tren del oro robado¨, que dice, que debajo del castillo, en los túneles se encuentra un tren nazi cargado de oro y otros tesoros, el cuál desapareció misteriosamente camino de Breslavia (Wrocław) a Wałbrzych entre 1944 a 1945.

En verano 2016 empezaron las excavaciones en busca de este tren. De momento los investigadores descubieron que el tren se encuentra oculto a 100 metros de profundidad bajo el castillo, pero si es cierto aún no se sabe.

Después de la Segunda Guerra Mundial las fronteras cambiaron de dueño, la región de la Baja Silesia fue puesta bajo la soberanía de Polonia. Y hoy en día en el castillo podemos disfrutar de su museo.


¿Qué ver en el castillo?


  El complejo se divide en tres partes que puedes visitar: el castillo, las terrazas, los establos y zonas ajardinadas, comprando una entrada puedas elegir que partes quieras ver. La única pega que tengo es que no hay guías en español, pero sí en inglés, alemán y ruso. Aquí puedes consultar los preciosCastillo Książ 





El la entrada del complejo encontrarás muchos restaurantes y tiendas, así, si te entra hambre podrás comprarte algo.



En el interior del castillo hay muchas salas que recrean como eran antes las habitaciones. Lo más bonito de eso son las decoraciones de algunas salas y las obras de arte que podrás encontrar allí.




Sin duda la parte que más me gusta son las terrazas y zonas ajardinadas. He visitado este castillo en octubre, los colores de los árboles y toda la vegetación son impresionantes. La verdad es que esa es una de las principales razones por lo que me encanta tanto mi tierra. Es que el cambio de las estaciones siempre te deja una imagen diferente y espectacular de un mismo sitio.







No olvides también visitar Palmiarnia, el jardín botánico del castillo. Se encuentra a unos 2 kilómetros del castillo. Te aconsejo bajar allí a pie por el camino que pasa a través del bosque y los verdes campos. Ese jardín fue el regalo de amor a Daisy de Pless por parte de su marido, fue construido en 1911. Allí se puede encontrar una gran cantidad de especies vegetales, tanto autóctonas como extranjeras, un buen lugar para pasar un buen rato entre la naturaleza tomando un café o lo que apetezca.




  Espero que este post te ayude en tu viaje a Polonia, por lo menos un poquito. También puedes dejarme un comentario sobre este sitio, si ya has estado allí o si tienes planeado visitarlo.

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